Marcos Valverde Jiménez: marcos_vj_1982@hotmail.com
Master Piece
Tipo de licencia: CREATIVE COMMONS
Certamen: Idéame 2014
Premisa - Sinopsis
Un reputado investigador del NIH americano (National Institute of Health) guarda escrupulosamente un secreto: en algunos de sus sueños predice el futuro. Su última visión ha sido realmente horrible y debe evitar que suceda una catástrofe que acabará con el país y afectará a todo el planeta. Pero todo se complica cuando al despertar de esta última pesadilla lo hace con 21 años menos.
PRÓLOGO
Jeffrey Cook es un tipo muy normal de 41 años. Un tipo muy normal al que le gusta el baseball, los libros de ornitología, pintar, hacer salsas para el pescado que come los domingos y es un amante de la escalada.
Siente que ha hecho muchas cosas interesantes en la vida, que conoce muchos lugares del mundo; se siente alagado por haber encontrado una cura definitiva para la diabetes.
Pero, ¿Qué siente ahora?; ve un niño cogido en volandas por sus padres, ve su casa alejarse, mira al cielo y ve humo; un humo que viene del fuego del horizonte. Ahora presiente una crisis a nivel mundial, algo muy gordo va a suceder y toda esta vida va a ir al carajo. Siente ira, ambición, traición, locura…radioactividad. Además ahora siente… ¿unos golpes metálicos?
Jeffrey: ¿qué coño pasa aquí?”.
J. Cook despierta, aunque aún no enfoca la vista y esos únicos sonidos que había a su alrededor han cesado. Es el sueño más agitado del que tiene recuerdo. Está deseando contárselo a su mujer y a su hijo, quien le ve como su súper héroe favorito. Como dice su pequeño Peter: “eres mi favorito después de Superman, porque tú no vuelas”.
Comienza a enfocar….de momento sólo los colores…” ¿porqué está todo tan blanco?”...por fin las formas; todo tan…austero. De repente el chirriar de un carrito.
Jeffrey:“¡Ahhgg!”,siente un dolor abdominal muy grande. “¿Pero qué demonios…?”.
Observa un gran cinturón marrón que le roza una herida en el estómago y que le tiene apresado a una gran silla con las patas sepultadas en el suelo. Otra vez los golpes metálicos. “Tin, tin, tin”. Corresponden a una porra metálica golpeada sobre una bandeja.