Ciudades democráticas: redes colaborativas y transnacionales

El grafo resultante, realizado por Pablo Aragón y Alberto Bicho, confirma una red densa, tupida y bastante transversal. Tras aplicar la función modularidad, que agrupa los nodos que se relacionan entre sí, la red se divide en diferentes comunidades. La comunidad naranja, compuesta por 535 nodos, gira en torno al perfil de MediaLab Prado (@MediaLabPrado, el más influyente del encuentro. En ella se enredan usuarios de MediaLab Prado y algunos de los participantes en las sesiones que tuvieron lugar en dicho espacio, como @bienpensado (Javier Arteaga), @urbanohumano (Doménico di Siena), @WikipoliicaJal o @urbanbetas. La comunidad azul claro, compuesta por 471 usuarios, está compuesta principalmente por instituciones con sede en Madrid, como el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofìa (@museoreinasofia) o Ayuntamiento de Madrid (@MADRID). Destaca la importancia del perfil de Manuela Carmena (@ManuelaCarmena), alcaldesa de Madrid, el nodo de dicha comunidad con contenido más replicado .

La comunidad verde, formada por 325 usuarios, está claramente presidida por el D Cent Project (@dcentproject). En ella aparecen influyentes actores internacionales en los campos de la democracia y la tecnología, que en su mayoría usan la lengua inglesa. Destacan los nodos de @nesta_uk (co-organizadora del encuentro), @paulmasonnews (el periodista Paul Mason), @RichDecibels (Richard D. Bartlett, fundador de la herramienta Loomio), @francesca_bria (directora del D Cent Project) o @TreborS (el académico Trebor Scholz ). En la comunidad morada, en la que participan 265 usuarios, el dialogo está tejido por actores influyentes en política digital, movimientos sociales y tecnopolítica, como Julian Assange, Pablo Soto (encargado de participación del Ayuntamiento de Madrid), Javier Toret o Baki Youssoufou (del movimiento francés Nuit Debout). Existe una subcomunidad, cuyo nodo principal es Pedro Kumamoto, de Wikipolítica Jalisco. La comunidad morada es clave, porque conecta casi todas las conversaciones.

La comunidad azul oscura, con 104 usuarios, es bastante heterogénea. Aunque las mayoría de sus miembros son destacados activistas y académicos brasileños (como Sergio Amadeu, Raquel Rolnik, Marcelo BRanco o Davi Miranda), en dicha comunidad también participa Birgitta Jónsdóttir (Partido Pirata de Islandia) o Natalie Fenton (Goldsmiths University of London).

El red resultante del hashtag #DemocracyLab brinda una panorámica de las sesiones, talleres y grupos de trabajo que tuvieron lugar entre el 23 y el 27 de mayo en MediaLab Prado. Como novedad al grafo correspondiente a todo el encuentro, destaca la existencia de una nueva comunidad (verde), con movimientos sociales, colectivos y actores relacionados con la ciudad. Al mismo tiempo, aplicando el parámetro betweenness centrality (intermediación), aparece más presente el perfil @abriendomadrid (del área de participación del Ayuntamiento de Madrid), @BarillariM5S (Davide Barillari, Movimento 5 Stelle) o el blog @CodigoAbiertoCC.

El diálogo existente de la red general del evento y el del #DemocracyLab tienen muchos patrones comunes. Existiendo hubs nítidos (nodos más influyentes) y clusters (racimos, conjuntos de nodos clave en el epicentro de una comunidad), la conversación de las ciudades democráticas es abierta, cooperativa y transversal. Algunos nodos están conectados simultáneamente a varias comunidades. Dichos nodos, como @iacocoba o @medialabprado, refuerzan los lazos débiles: construyen puentes y relaciones entre diferentes comunidades.

La red nacida en el encuentro #CiudadesDemocráticas insinúa un futuro de instituciones abiertas, diálogos asimétricos, internacionales y transversales entre los múltiples actores que buscan nuevos horizontes para la participación ciudadana.