Aproximaciones a Medios Sintientes por Quadrature

Imagen recurso Quadrature Medios Sintientes

Limitados a los ojos y los oídos, al olfato, al gusto y al tacto, los límites del conocimiento humano solían estar directamente relacionados con las restricciones del cuerpo humano. Su alcance limitado en el tiempo, el espacio y la frecuencia, pintaba una imagen poco profunda del
mundo, en la que faltaban muchas capas de información. Con el auge de la tecnología, la humanidad mejoró su capacidad natural de percepción y externalizó sus órganos y funciones físicas a máquinas, sensores y dispositivos externos[1].

Estos aparatos auxiliares revelaron muchas capas nuevas de la realidad y permitieron a la humanidad no sólo insertar algunas piezas que faltaban en el cuadro, sino también mirar al pasado y predecir posibles futuros. Este proceso comenzó hace mucho tiempo y está lejos de llegar a su fin, y constituye uno de los atributos fundamentales del ser humano. El uso de la tecnología como medio para leer y escribir la realidad define una diferencia muy clara entre "nosotros" y todos los demás seres sensibles.

Sin embargo, utilizar los medios como sensores humanos ampliados[2] es sólo el primer paso para generar nuevos conocimientos significativos. A estas alturas los datos parecen estar disponibles en abundancia pero sólo extrayendo los fragmentos relevantes del montón de trivialidades, encontrando algún significado en un flujo caótico de datos brutos sin filtrar, se puede obtener información real. El procesamiento sigue a la percepción. Estas tareas pueden ser más bien preliminares o ya innovadoras en sí mismas: la construcción del contenido y la percepción está integrada tanto en el ensayo como en la teoría.

Mientras el insaciable deseo de comprender empuja el horizonte de nuestras limitadas mentes cada vez más lejos, los esfuerzos de búsqueda de la verdad ya no se limitan al presente, sino que llegan muy lejos en el futuro. La potencia de cálculo que supera muchas veces la nuestra permite realizar simulaciones y previsiones que, a su vez, alteran nuestro comportamiento en el entorno actual, entrando todos nosotros en gigantescos bucles de retroalimentación.

Uno de los privilegios del arte de los medios es cuestionar críticamente la propia tecnología que utiliza, para abrir nuevas posibilidades e interpretaciones alternativas de lo que ha sido y lo que vendrá. Con sociedades enteras convertidas en datos por las aplicaciones y otras herramientas, con la inteligencia artificial no sólo utilizada como poder computacional adicional sino como sistemas de recolección de información, es más que relevante no sólo consumir, sino también contemplar, criticar y (co)crear estas tecnologías y sus implicaciones. A diferencia de la
investigación académica, la investigación artística no tiene que encontrar la única respuesta objetiva, sino que es libre de proporcionar narrativas subjetivas, soluciones especulativas, enfoques puramente poéticos o nada en absoluto.

Siguiendo a Peter Weibel, este campo no debe dejarse sólo en manos de científicos e ingenieros, sino que las artes deben unirse a otros sistemas epistémicos para explicar y cambiar el mundo[3].

Porque es necesaria una multitud de voces para sumergirnos cada vez más en los diversos reflejos de la realidad, para descifrar nuevas lecturas y construir nuevas escrituras de la misma y para descubrir las piezas más pequeñas del panorama general, que en su totalidad está y probablemente siempre estará, oculto para nosotros.

"Si resultara [...], que podemos conocer y, por tanto, también producir considerablemente más de lo que somos capaces de comprender con el pensamiento, entonces habríamos caído realmente en nuestra propia trampa, por así decirlo, o nos habríamos convertido en los esclavos-no, como comúnmente se cree, de nuestras máquinas, sino- de nuestra propia capacidad cognitiva, criaturas abandonadas por todo espíritu y todos los espíritus buenos, que se ven indefensos a merced de todo aparato que puedan producir, por muy disparatados o mortíferos
que sean sus efectos".

QuadratureRetrato Quadrature

Quadrature utiliza la tecnología como medio para leer y escribir realidades, utilizando los datos como principal material artístico. Los artistas, afincados en Berlín, utilizan medios transdisciplinares para crear obras de arte que no sólo captan la intersección entre el arte y la ciencia, sino también la convergencia ente lo digital y analógico. Los dos miembros del grupo, Juliane Götz y Sebastian Neitsch se conocieron hace 15 años en la Burg Giebichenstein Kunsthochschule Halle.
 

Tipo de post
Blog
Autor
Medialab Matadero