Madrid Calle 30 se constituyó originalmente con el fin de llevar a cabo el proyecto de transformación de la red viaria de la M-30. Un desarrollo de tres años que ha dado como fruto la disposición de una infraestructura viaria ligada a las necesidades económicas y culturales de la Madrid contemporánea, a través de la remodelación de siete enlaces, la construcción de más de medio centenar de kilómetros de túnel, infraestructuras de iluminación y suministro de energía y el desarrollo de sistemas inteligentes de tráfico y transporte, entre otros.
Estos sistemas inteligentes de tráfico y transporte proporcionan datos en tiempo real sobre la velocidad, intensidad o densidad de tráfico a través de dispositivos como estaciones de toma datos o cámaras lectoras de matrícula. Esta información se transmite a través de una red de comunicaciones al Centro de Control de Calle 30.
La visita es una puerta abierta a esta unidad de control, con una explicación de los sistemas de trabajo del mismo y una descripción de la gestión y los distintos usos que se hace de los datos que llegan al Centro de Control de Calle 30